Por algo la liturgia oriental termina los ritos fúnebres con el aleluya por todos los muertos. Pidamos para ellos la bombilla de las moradas eternas, mientras el pensamiento se detiene en la resurrección que aguarda a nuestros propios restos mortales: “Espero en la resurrección de los muertos”. Luego rezamos un https://misteriosdolorosos98753.blogproducer.com/32317959/un-imparcial-vista-de-los-misterios-del-santo-rosario